No se recomienda el uso de preparaciones caseras o sustancias que no hayan sido diseñadas especialmente para la estimulación sexual, por ejemplo el aceite de cocina, de bebé, la vaselina, entre otros, puede causar irritación o alergia en la piel de los genitales, resequedad vaginal y además pueden dañar o romper los preservativos, al igual que deteriorar los juguetes sexuales
Por eso, lo ideal es usar lubricantes a base de agua o silicona que estén fabricados con el objetivo de usarse durante la actividad sexual. Adicional, en el mercado también puedes encontrar lubricantes sexuales de origen orgánico.
Para mayor información te invitamos a consultar los siguientes contenidos: