El implante subdérmico es un método anticonceptivo formado por una o dos varillas plásticas muy pequeñas, similares en tamaño a un fósforo. Funciona liberando de manera continua bajas dosis de una hormona llamada progestágeno.
A diferencia de otros métodos, no contiene estrógenos, lo que lo convierte en una opción segura durante la lactancia o para mujeres que no pueden usar anticonceptivos con estrógenos.
Dependiendo del tipo de implante, ofrece protección anticonceptiva entre 3 y 5 años. Se coloca en el brazo mediante un procedimiento sencillo, realizado por un profesional de salud capacitado.
Este método no te protege de las infecciones de transmisión sexual. Por eso, lo mejor es combinarlo siempre con el condón.