También conocidos como ejercicios de Kegel sirven para fortalecer los músculos de la pelvis que sostienen los diferentes órganos que se encuentran en esta área (vejiga, la vagina, el pene y el recto). Para hacerlo solo debes identificar el músculo que usas para orinar, apretarlo por 5 segundos o más y relajarlo. Luego de que aprendas hacerlo puedes practicarlo en diferentes momentos del día y en distintas posiciones, de pie, sentada (o), acostada (o). Realiza 10 repeticiones 3 veces al día.