¡Claro que es normal! Con la adolescencia llegan una serie de cambios físicos y hormonales que tienen que ver con el desarrollo sexual de las personas, es decir que a partir de este momento empiezas a sentir deseo y curiosidad de empezar a experimentar con tu sexualidad. Y después cuando seleccionas una pareja es porque te sientes atraído(a) romántica y sexualmente hacia él o ella, así que es normal que cuando estás con esta persona sientas deseo, que tengas pensamientos con contenido sexual y que tengas respuestas físicas que indiquen deseo y excitación, como la erección del pene en los hombres o la lubricación de la vagina en las mujeres.
Si tienes deseos de experimentar, lo primero que debes hacer es hablar con tu pareja para explicarle lo que sientas y saber si esa persona siente lo mismo, ya que hagas lo que hagas ¡siempre debe ser con el consentimiento de ambos! Si ambos deciden que quieren tener relaciones sexuales, es importante que soliciten una cita de anticoncepción a través de sus servicios de salud, con el objetivo de prevenir un embarazo no deseado y que, además, siempre utilicen un condón como barrera para evitar las infecciones de transmisión sexual.