Así como existen orientaciones sexuales diversas, también existen prácticas sexuales distintas y es importante permitirnos explorarlas, tanto de forma individual, como en pareja; acá te dejamos algunas recomendaciones.
En primer lugar, la base fundamental del disfrute sexual es comprender que te gusta a ti; por este motivo es importante que te des un tiempo para explorarte. Independientemente de la orientación sexual de cada persona, la masturbación y la exploración es clave para que identifiques las zonas de tu cuerpo que son más sensibles y cuáles son los estímulos que más te excitan.
Este tipo de exploraciones facilita que, cuando estés en un espacio con una pareja, tengas más claro que es lo que te gustaría hacer y que límites no quisieras cruzar. Esto construye espacios seguros que permiten disfrutar mucho mejor del momento; pues las relaciones sexuales no son como en las películas en las que todo fluye de manera perfecta y las personas se mueven en completa sincronía. La realidad es que cuando tenemos sexo, en especial las primeras veces lograr una dinámica sexual satisfactoria, toma tiempo y por esto la comunicación con la otra persona es clave.
Adicional, a lo anterior es importante que antes de realizar cualquier práctica sexual ambos se informen sobre en qué consiste, cómo lo van a hacer, que limites de seguridad van a establecer y qué recomendaciones deben tener en cuenta para que la práctica sea placentera y segura (lubricante, uso de condón, tips de relajación, entre otros.)