Entendemos que esta puede ser una situación incómoda. Sin embargo, es importante que no entren en pánico y que no eviten hablar del tema. Puede que su respuesta inmediata no sea la mejor, pero traten de tomarse unos segundos para recuperar la calma, organizarse y poder dar una respuesta tranquila.
Ahora, también es importante que tengan presente la edad de su hija (o), ya que cuando son muy pequeños es posible que no entiendan lo que está sucediendo o simplemente no lo hayan visto todo, en cuyo caso lo mejor es brindarle una explicación sencilla y acorde a su edad. Por ejemplo, "Tu mamá y yo nos estábamos abrazando". También es importante estar atentos a la reacción que pueda tener en ese momento, puede pasar que la niña (o) se asuste y piense que alguien está lastimado, por lo que puede ser necesario calmarla.
En edades más avanzadas (más de 5 años), será necesario tener una conversación breve, tal vez un día después del incidente. Busquen un espacio tranquilo, lo ideal es que sean los padres quienes traigan el tema a colación, para que no sea una responsabilidad que recae sobre la niña (o), traten de ponerse en los zapatos de sus hijos, ellos ven las situaciones de manera más sencilla, si no han tenido una conversación antes sobre estos temas, pueden empezar tanteando que sabe la niña (a) al respecto, por ejemplo "¿Te acuerdas cuando entraste a nuestra habitación anoche?... esto es lo que las personas adultas hacen cuando se quieren" y traten de responder todas las preguntas que tenga. Recuerden que aunque esta puede ser una conversación incómoda, hablar con naturalidad les hará a ellos que esto no es algo problemático y además dejará la puerta abierta para otras conversaciones.
Finalmente y para futuras ocasiones tomen algunas precauciones como por ejemplo cerrar la puerta con llave o pedir apoyo para el cuidado de los niños, para así tener tiempo en pareja.